En ocasiones, un final de curso como lo ha sido el 2016/2017, puede ser
agridulce, según con que noticias terminemos el curso escolar:
DULCE... por las emocionantes despedidas, graduaciones de Infantil y de Secundaria, cambios de curso,
etapa, boletines de notas, trabajo de verano... Pero no todo son
recuerdos, anécdotas y buenas noticias...
También hay momentos AGRIOS, cuando llegan las malas noticias, que no te podías ni imaginar que sucederían, o por lo menos, no tan pronto...
Desgraciadamente, cuando nos enteramos de la noticia del fallecimiento
de Agustina, la que ha sido portera de Cluny durante muchos años, nuestra cara cambió y
nuestra mente volaba al pasado, en busca de los mejores recuerdos y
anécdotas con ella, nuestra compañera Agustina, una mujer grande por fuera,
pero por dentro, más grande todavía, con un corazón que no le cabe en el pecho. Agustina
siempre estaba en portería, hiciera sol, lloviera o tronara, nunca faltaba a su lugar de trabajo. Simpre con una sonrisa y tendiendo la mano a cualquiera que pasara por portería del cole.
Era una trabajadora nata, al pie del
cañón en portería, desde primera hora de la mañana, abriendo el colegio,
y recibiéndonos a todos los que por allí pasábamos, con su maravillosa
sonrisa, con sus buenos días o buenas tardes, cargados de energía y
positividad.
Agustina, era, es y siempre será parte del colegio de Cluny Novelda, era la primera cara que veías al entrar por
portería. Ha destacado por su humildad, gran paciencia y por ser una persona muy atenta con todo el mundo que por allí pasaba, da igual que
fuera bebé, niño, joven o adulto... Efectiva en su trabajo y en su
trato con todo el personal del centro, familias y alumnos. Su trabajo no
solo era hacer fotocopias, custodiar llaves, coger el teléfono, abrir y
cerrar puertas... No solo eso, su trabajo diario era mucho más: era
darte con alegría los buenos días, trato ejemplar, siempre atenta con la comunidad
educativa y religiosa del centro, cercana con peques y mayores... También era la enfermera de nuestro cole... si un alumn@ se caía... acudías a portería, dónde estaba Agustina que con sus tiernas manos, y dulce voz, calmaba a grandes y
pequeños, buscaba la mejor solución y curaba las heridas de patio
siempre con una sonrisa y mucho cariño... Sabía tratar a todo el mundo,
para que sintiera que estar en Cluny Novelda, era estar en un entrañable
hogar y tener a Agustina con nosotr@s, era como tener otra madre, pero
dentro del colegio... Una madre que cuida a sus grandes y pequeños. Como una madre, que consuela, que quita los agobios de examenes y épocas de mucho trabajo de profesores y maestras, vendedora de lotería y toñas en
la tómbola, o todo lo que hiciera falta para recaudar dinero y
destinarlo a obras solidarias de la congregación San José de Cluny, una
compañera para nuestras monjitas de Cluny ... inventora de
las mejores soluciones a los problemas e imprevistos que podían surgir
en el día a día en nuestro cole.
Pero sobretodo, Agustina ha sido y es un ángel de la
guarda que velaba y velará por todos.
Con ayuda de nuestra Beata Ana María
Javouhey, tan devota de ella, Agustina tenía en común con nuestra fundadora, su dulzura y trato humano.
Por todo ello y
mucho más, se merece nuestro MÁS SINCERO AGRADECIMIENTO, no solo por su
labor incansable dentro del cole, también por su trato fuera de él, tan cercano y humano,
que jamás olvidaremos, aquellos que te conocimos y pasamos por tus manos
y pudimos disfrutarte, siempre te recordaremos como la gran mujer que fuiste, un gran ejemplo de buena persona.
"Conseguimos más con el ejemplo que con las palabras."
Carta 874 de la Beata Ana María Javouhey.
Agustina, tú has sido una persona ejemplar y así siempre te recordaremos.
Decanse en paz querida Agustina. "QUERERTE FUE MUY FÁCIL, OLVIDARTE ES IMPOSIBLE"
Todos los que hemos sido y somos Cluny , te llevaremos grabada en
nuestro corazón y recordar Cluny, siempre fue, es y será , recordarte a
ti, Agustina . ¡Te Queremos!
Y estamos seguros que Dios tiene un lugar
especial para ti, en el Reino de los Cielos.
🙏 Gracias por todo AGUSTINA. 💗
Con cariño, Viki.