Durante uno de mis cruceros vacacionales por Internet me he topado, por casualidad, con estos dos vídeos curiosos, de dos amigos caninos.
Y aunque en principio no parecen tener relación directa con la educación, como el contenido habitual del blog que nos ocupa, yo soy de la opinión que todo es educación, y que de todo tenemos que saber valorar el aprendizaje que en su trasfondo subyace.
Por todo ello, me ha dado por pensar (cosa poca habitual) y es que en innumerables ocasiones olvidamos que la enseñanza debe ser educación y que no debe coexistir una sin la otra, o vemos como esta última, que hoy nos ha traído hasta aquí, la educación, queda relegada a terceras personas, "profesionales" (dicen), o instituciones como los colegios. Cabe reflexionar al respecto, ya que todos y todas, somos ejemplos de alguien en alguna ocasión o momento.
No solo maestros o profesores, sino y más importante: padres, madres, hermanos, tíos y abuelos, primos, amigos, conocidos de la calle o la televisión... cada uno de nosotros tiene un referente y somos un referente para otro.
Un modelo, un espejo, alguien a quien nos gustaría emular o imitar, seguir sus pasos, y aunque no siempre sea evidente, ni verbalizado, como en nuestros ejemplos perrunos, así queda demostrado.
Como muestra, estos simpáticos vídeos, de un husky criado entre gatos, y que se comporta como tal, ya que es lo que ha visto y aprendido y otro perro que parece practicar parkour ya que es con lo que ha crecido y ha visto hacer y practicado.
Con estos vídeos, reflexionando y valorando la importancia de la educación y del ejemplo de cada uno de nosotros hacia el otro, nos despedimos hasta septiembre, cuando la vorágine del curso nos posea, pero donde entre todos y todas, y con pequeños cambios, intentemos construir una sociedad mejor.
Un abrazo.